Considerada como una de las principales técnicas de Mantenimiento Predictivo, a causa de la gama de informaciones que se pueden detectar en su aplicación.
Es posible diagnosticar en equipos rotativos problemas como desalineación, desbalanceo, torcedura de eje, holgura, problemas en acoplamiento y correas de transmisión, deficiencia de lubricación, rodamientos dañados o con montaje inadecuado, problemas eléctricos en motores.